Por cuenta de mi total incapacidad de manejar una infeliz lavadora, el color de esta temporada es: el rosado.
Ya había tenido mis malentendidos con dicha máquina (ella no entendía que yo no quiero que mi ropa sea azul bebé), pero el de anoche me perjudicó mucho, porque cambiarle el color a mi ropa me enfurece, pero dañar una prenda que no es mía ya es otra cosa.
La Próxima Cosecha productions presenta:
Colección invierno-invierno (porque estoy en Bogotá) 2007 :
La chaqueta que me prestaron para la fiesta del sábado, solía ser beige…
Mi nuevo saco color lila, antes tenía uno azul, pero desapareció en la lavadora y me encontré este.
Cuatro pares de medias, que ahora hacen juego con uno de mis pantalones favoritos, el cual de beige pasó a rosadito como la chaqueta, snif.
Mi pijama fucsia, principal sospechosa del crimen, pero eso sí, me quedó bien limpiecita, y hasta sonriente.
La lavadora me prohibió acercarme a ella hasta que aprenda a separar la ropa de color de la ropa clara. Y ya en serio, no sé cómo voy a hacer para responderle a la dueña de la chaqueta. Sinceramente ¡Esto sólo me pasa a mí!
Las fotos tienen muy mala resolución porque las tomé con la webcam, quiero una cámara digital, pero supongo que la compraré en la próxima cosecha.
Y en otras noticias, mi cédula (de hecho es contraseña, porque la cédula no ha salido) se aburrió del frío y se fue de paseo a Cali con mi novio, así que en este momento soy una indocumentada.
Etiquetas: Detalles absolutamente irrelevantes, Maldita sea mi suerte. Dele. Ríase de mí
jajajaj chistosisimo !!