martes, 11 de noviembre de 2014
No sólo de playa vive el hombre

Definitivamente lo mío es la playa, a mí me llevan cerca al mar y me perdieron, no existe nada que supere la tranquilidad de estar tirado en la arena oyendo el sonido de las olas. Pero ya que en agosto tuve la oportunidad de pasar unos días en Farallón (Panamá) junto a mi familia, decidí que era hora de cambiar de itinerario y planear unas mini vacaciones diferentes a todas las que había tenido antes. Y a la selva amazónica nos fuimos.

Antes de viajar leí muchísimo sobre las actividades por hacer y todos los sitios por visitar en Leticia. Entonces me di cuenta de que el tiempo que teníamos disponible no sería suficiente para todos los planes maravillosos de los que me antojé, y con mucho pesar me limité a lo que nuestros tres días y dos noches nos permitirían conocer. Así que este post viene siendo una especie de guía súper express para el turista en Leticia.

Para empezar, si usted está planeando un viaje con restricciones de tiempo similares a las mías le recomiendo, más bien le ruego, que no se pierda el tour de un día completo a la isla de los micos que ofrece Decameron Explorer. Es un plan que reúne la mayor parte de las actividades turísticas típicas de la zona. Tiene de todo: interacción con guacamayas, victorias regias, delfines rosados y monos fraile; recorrido por el río Amazonas, caminata por la selva, canopy, canotaje, pesca artesanal, comida local, venta de artesanías, y un diluvio tropical que podría no estar incluido en su día, pero en el nuestro definitivamente lo estuvo. En fin, es un plan que vale muchísimo la pena sobre todo para quienes por primera vez nos adentramos en el Amazonas.


Cuadrar 8 micos para la foto es mucho más difícil de lo que uno se imagina.


Pero me estoy adelantando, la isla de los micos fue nuestro plan del segundo día. Nuestro primer día comenzó con un recorrido a pie por Leticia hasta el parque Santander, donde pudimos ver los miles de loros y golondrinas que todos los días regresan al parque a eso de las seis de la tarde. Es un espectáculo que ni siquiera me esforzaré en describir porque no sirve de nada leerlo, hay que estar ahí para verlo y oirlo.


Miles de aves en una coreografía hermosa e interminable.


Esa noche estuvimos en una charla con un chamán en la maloca del hotel, una actividad a la que, lo confieso, entré con algo de prevención porque me sentía como Lindsay en Arrested Development. Sin embargo resultó ser una conversación muy interesante y educativa. El chamán nos enseñó acerca de su cultura, sus creencias, sus tradiciones y hasta un poco de dialecto y de danza… nos rajamos en ambos.

- Uh, were you able to book my 3:00 shaman?
- Did you want the deep wisdom or just a light ego cleanse? We do those by the pool.


En nuestro último día en Leticia decidimos explorar por nuestra cuenta y fue así como terminamos en Brasil. Suena lejos pero en realidad es cuestión caminar diez minutos, cruzar una avenida y ya cambiaste de país. La caminata por Tabatinga fue una experiencia memorable, nada como perderse en una ciudad para conocerla de verdad.


Creí que ese era el punto más oriental en el que había estado en toda mi vida pero la verdad es que no sé leer mapas.


Visitamos la Casa do Chocolate pero nuestro guía de la isla de los micos ya nos había advertido que los precios allá eran “para turistas” y que podríamos conseguir unos más favorables en los supermercados locales. Pusimos en práctica nuestro mejor intento de portugués, pero el que terminó dándonos direcciones fue un niño fronterizo que manejaba los dos idiomas a la perfección.


Aventuras de Maria() en los mercados de Tabatinga presenta: ¿¡que los Brasileños comen QUÉ!?


Y eso fue todo, tal como lo esperaba el tiempo se nos fue volando y ya era hora de volver a Bogotá. Disfruté muchísimo estas pequeñas vacaciones en Leticia y estoy segura de que pronto volveré para recorrer lo que me quedó faltando. Recomiendo a ojo cerrado el hotel Decalodge Ticuna, que al igual que todos los hoteles de la cadena Multivacaciones Decameron que he tenido la oportunidad de conocer estuvo a la altura de mis expectativas.


La infaltable foto con Kapax.

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Y esto sólo le pasó a Maria() a las 9:40 a. m. |


5 Infelices comentarios:


  • At 11 de noviembre de 2014, 11:52, Anonymous Anónimo

    Y donde te sacaste la foto de Kapax? Yo creo que visito pronto y no quiero volver sin ese recuerdo!

     
  • At 11 de noviembre de 2014, 12:17, Blogger Maria()

    Kapax trabaja en el hotel Decameron y uno se lo encuentra todos los días en el comedor y el área de la piscina. Es muy amable, se sienta a conversar con los huéspedes y les recomienda planes para hacer en Leticia :)

     
  • At 11 de noviembre de 2014, 13:44, Blogger Mafe

    Ese paseo es la locura y si, paseo a la selva sin diluvio de película no falta. Yo creo que el chamán tiene acuerdo cross-over religioso para que a cada turista le toque, por lo menos, un ratico de deeeeluvio.

    Micos!!!!

     
  • At 18 de noviembre de 2014, 10:34, Anonymous Anónimo

    El viaje al amazonas es mucho mejor de lo que uno se alcanza a imaginar. Hay que ir con muchos días disponibles para hacer más tours, porque planes es lo que hay!

    Hay que ir con la mejor actitud y preparado para que pase cualquier cosa, pero la actitud y el servicio de los operadores de los tours de Decameron hace que uno disfrute cada segundo del viaje.

    Hay que volver! ;)

     
  • At 18 de noviembre de 2014, 20:42, Anonymous Anónimo

    Mas bien cuente lo de la propuesta de matrimonio, con Carlos Vives a bordo