viernes, 2 de mayo de 2008
Hoy más que nunca me duele la distancia...

Es esta impotencia de no poder estar junto a ellos en un momento tan díficil.
Es la tristeza al pensar que pasará más de un mes hasta que pueda verlos.

Madre: te regalo mi ángel de la guarda para que te cuide mientras yo no puedo.
Padre: no me pidas que no me preocupe, sé que están bien, pero es inevitable sentirme así.
 
Y esto sólo le pasó a Maria() a las 5:08 p. m. |


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